Una vez más, el Ayuntamiento de Iruña city decide ser el más democratico y moderno y, tras hacer una selección entre miles de participantes, nos dejan ocho carteles posibles. Nuevamente entramos en la polémica. Porque nos conocemos de tiempo atrás querido amigo, y ya hempos asumido que el cartel de fiestas es siempre una cartel FEO. Sin embargo, este año veo un destello de luz al final del tunel entre algunos de los candidatos. Tenemos, obviamente los tradicionales, y los que se empeñan en meter al toro, pasando por los "originales" que demuestran cuanto daño ha hecho el arte contemporaneo al mundo. Tenemos hasta uno, cuyo autor debe ser de la feria de mediums que hubo hace poco en Pamplona, y se atreve con un excalofriante vaticinio. Pero vamos por partes.
Cartel 1: El tradicionalEste, aunque me gusta (cosa rara en mí), no es mi favorito. Pero tiene todas las papeletas para ser el ganador. Tiene la que es la estampa más conocida (fuera el toro y el encierro... ¡qué si, que es lo más conocido, pero ya vale, coño!). Tenemos el momento del txupinazo, Plaza del Ayuntamiento y una multitud blanca y roja abarrotando las calles. Todo con un toque de antiguo que le queda bien. Un acierto, oye.
Pero a mi el que me llama es el siguiente. Original pero bonito, que no siempre van de la mano.
Cartel 2: el cubistaTradicional fondo rojo. Y una forma que sugiere el cuerno del toro y los encierros (comete tus palabras del parrafo anterior). Pero en vez de ponernos al mozo y al toro, imagen de la que ya estamos cansados, el autor se ha centrado en el recorrido. Un curro, eh. Ha sacado una foto a todos los edificios que forman el recorrido del encierro, uniendolos con "potosó" y dandole ese último toque de cuerno. Original, con el toro para que los turistas sepan que, sí, aquí hay encierros, y de rojo, que es el color. Mi voto (que no voy a votar... ¿qué te dé mis datos? ¡tu quieres ficharme!).
Cartel 3: El conceptualAquí está el cartel que todos los que despotricamos contra el cartel FEO, nos vemos obligados a alabar (aunque sea una tonteria como una casa). Porque es original, tiene los colores... Pero es una lavadora. Vale que en Sanfermines todo es cerdería sin fin y, por qué no decirlo, que somos muy guarretes esos 9 días. Que la lavadora nos salva día a día cuando nos quedamos sin camisetas ni pantalones blancos (algunos de los cuales ni siquiera se salvarán de los ronchales de kalimotxo y conocerán la basura). Original, llama la atención, se salé de lo habitual (pero no nos gusta: "¿qué es eso de una lavadora para anunciar los sanfermines?). A los críticos nos entra la vena tradicionalista, pero la ocultamos en una pseudo-pedantería artística para defender este cartel. Un cartel que cualquier alemán confundirá con un anuncio de Fagor. Con lo cual, capacidad de promoción turística: cero.
Cartel 4 y 5: Los "originales"Un ejemplo de lo que los versados en despotricar contra el cartel de Sanfermines denominamos: cartel FEO. Vease "original" dentro del más despectivo de los sentidos. Entramos en "la forma toro". ¿Y con qué hacemos el toro? Vamos a pensar... ¡Con la faja! ¡Soy un peazo artista! Haz cuatro dobleces, una foto y... hala, a casica. Pero con la faja igual se parece al de unos años, que era el toro hecho con un pañuelico. Ajam... A ver, características de los Sanfermines... ¡¡El bebercio!! Así que una bota, como la cabeza, y con el cordel me hago los cuernos... ¡esto gana fijo! Pero, por favor, que es cierto que en San Fermín le damos mucho al pimple, pero menuda declaración de principios. La próxima vez que hagan un collago con las fotos de todos, borrachos perdidos, con la camiseta hecha girones, la cara roja perdida y el gesto desencajado al borde del coma etílico. Así: somos originales y representamos lo que son los Sanfermines para los turistas.
Cartel 6: El "pop" nostalgico
Un tio, de nuestras edades, no nos vayamos a pensar. A la hora de hacer el cartel se acordó de los tiempos de la nocilla y las partidas que echaba al Supermario. Ese personaje pixelado, que se ponía ciego a setas y veia tortugas que lanzaban fuego por la boca. Pues lo mismo, pero como si fueran mozos del encierro.
No me gusta. Dejémoslo ahí.
Cartel 7: El vaticinio"Y el 6 de julio de 2009, será el día en que nazca el Anticristo", Apocalipsis 13.7.
"¡Joder, qué miedo!", me dije nada más ver este cartel. Llega el fin del mundo muchacho, así que aprovechar estos Sanfermines... ¡¡¡porque serán los últimos!!! ¿Pero en qué estaba pensando el autor de este cartel? Una explosión negra y dos ojos diabólicos, blancos y brillantes, que nos lanza una mirada amenazadora. "Está ahí, está entre nosotros. Se oculta bajo el aspecto de un borracho más. ¡Pero conocerás el fuego del infierno cuando se desate su ira!". Espero que el Vaticano se haya dado por aludido, y camufle exorcistas vestidos de chinos luminosos (con esos chupetes brillantes) o de senegaleses vendedores de gafas de sol. De todas maneras, estaremos vigilantes.
Ni me molesto en comentar el último. Que yo llamo...
Cartel 8: No commnts